De acuerdo con la Sunafil, no es posible para un empleador obligara su trabajador a vacunarse, pues ello atentaría contra su libertad de conciencia. En ese sentido, señalan que “en el supuesto de que el empleador obligue o coaccione a (su) trabajador a vacunarse, este podría presentar una denuncia ante la Sunafil por presuntos actos de hostilidad”.
La entidad señala que esto se debe a que la aplicación de la vacuna tiene carácter voluntario, no existiendo norma legal que les exija a los trabajadores contar con ella. Por tanto, señalaron en su Twitter oficial que “impedir laborar al trabajador por no encontrarse vacunado constituiría una vulneración a su derecho al trabajo”.
Sunafil señala que lo máximo que puede realizar el empleador con relación a la vacunación son “campañas informativas a fin de poner en conocimiento de los trabajadores las ventajas e inconvenientes de la vacunación”, con el objetivo de persuadirlos a vacunarse.
“La posición de Sunafil es muy conservadora y equivocada”, señala Diego Castillo, socio del estudio Hernández.
Casitllo indica que estamos ante una colisión entre el derecho a la salud y el derecho a la libertad de conciencia, en la cual él considera debe primar la salud.
“Esto no se trata de un capricho del empleador. Se trata de proteger el resto de trabajadores que se encuentran en el centro de trabajo”, agrega. Sin embargo, no recomienda a empresas ir en contra de lo dispuesto por la Sunafil, dadas las posibles multas que se le podrían imponer.
Fuente: Diario Gestión
Fecha: 18/08/2021
