La Ley N° 31980, cuyas disposiciones marcan las pautas para impulsar el desarrollo integral y sostenible del Centro Histórico de Lima, constituye un ejemplo de cómo se deben ejecutar las acciones de recuperación de otras importantes capitales en el país, las cuales tienen que empezar con la elaboración de un plan maestro, afirmó la decana del Colegio de Arquitectos de Perú, Lourdes Giusti Hundskopf.
En declaraciones al Diario Oficial El Peruano, expresó su satisfacción por la publicación de la norma y la calificó de “excelente”, pues –sostuvo– representa “un antes y un después” de la manera en la que las municipalidades pueden recuperar esos tradicionales espacios de sus ciudades.
“¿Cuál es la receta para recuperar Cusco, Arequipa, Cajamarca, Ayacucho?, pues, primero, elaborar un plan maestro, contar con una buena herramienta de ordenamiento urbano, cultural y de patrimonio muy claro y, segundo, crear incentivos, generar recursos económicos, porque muchas veces nos preguntamos por qué no hacen nada los municipios y son los que menos dinero reciben en toda América Latina, seguramente”, refirió.
Giusti aseguró que la Ley N° 31980 cuenta con esos elementos, sobre la base del reconocimiento del trabajo que ya se realiza en el Centro Histórico de Lima, que es la única ciudad del Perú que posee una herramienta muy sólida de gestión, trabajada junto con el Ministerio de Cultura, también con el Ministerio de Vivienda, Construcción y Saneamiento.
En este punto, destacó que la nueva normativa la impulsó el arquitecto Luis Martín Bogdanovich, que dirige el Programa Municipal para la Recuperación del Centro Histórico de Lima (Prolima). “Hace un año nos mostró la propuesta de ley, que cambió un poquito, pero en líneas generales es lo mismo”, refirió.
Deducciones
Al entrar en detalles, la decana mencionó que la ley permitirá que las personas naturales y jurídicas que decidan invertir para recuperar un inmueble en el Centro Histórico de Lima deduzcan el 30% de sus gastos en impuestos.
“Lo más importante es que cada año el Ministerio de Economía y Finanzas le transferirá a la Municipalidad de Lima el 3% de todo el impuesto general a las ventas (IGV) que se recaude en el Centro Histórico”, subrayó.
Esta operación, señaló, representará un aproximado de 200 millones de soles que la comuna recibirá anualmente, adicionales al presupuesto general, con el fin exclusivo de invertir en el Centro Histórico de la capital del país.
“Otro aspecto muy importante es que se cambia el procedimiento de aprobación de licencias. En la actualidad, por ejemplo, cuando una empresa busca desarrollar un hotel o un edificio de oficinas corporativas en el inmueble que compró, lo primero que se hace por la normativa actual es pedirle el último plano aprobado y que esté inscrito en Registros Públicos, en la municipalidad”, explicó.
En su mayoría, indicó, son planos de 60, 80 años atrás y si el inmueble no es idéntico tiene que regularizarlos o incluso lo llevan al Ministerio de Cultura para un procedimiento administrativo sancionador y hasta puede recibir una denuncia penal, porque la Ley de Cultura establece que es como una agresión al patrimonio cultural. “Es como si hubiéramos cambiado Machu Picchu. En la normativa actual no existe una gradualidad, constituye un absurdo. La Ley N° 31980 corrige de fondo esta situación”, anotó.
Vida
Giusti manifestó que el Centro Histórico de Lima es muy inseguro en la noche. “En otros países, los centros históricos están llenos de vida, habitar en el Centro Histórico de Madrid o Nueva York, u otros, es para los millonarios o la gente que por herencia reside desde hace años en esas zonas”, aseveró.
“Si una empresa compraba una casona gigantesca, ¿qué familia podrá vivir ahí? Por ejemplo, ese inmueble se podría dividir en cuatro partes, hacer viviendas y, tal vez, venderlas. Hasta hace poco estaba prohibido y, así, ¿cómo se iba a fomentar que la gente venga a vivir al Centro Histórico de Lima, si es que no se permitía la independización?”, se preguntó.
Por lo tanto, explicó, se impedía que se compre un departamento con su partida registral y pueda tener acceso a un préstamo hipotecario. “Ahora sí se permitirá la independización de unidades de vivienda en un edificio histórico”, agregó.
La decana resaltó que la comuna metropolitana pueda intervenir los grandes inmuebles y casonas históricas que se caen a pedazos y tugurizadas, porque murió el dueño, no hay propietarios, no hay herederos o existen pleitos de varias generaciones de deudos que nunca se ponen de acuerdo. “La municipalidad no tenía con quién tratar y estaba prohibida de intervenir”, reveló.
La nueva ley, dijo, precisa que si un inmueble se declara inhabitable, el municipio podrá intervenir para resguardar la seguridad de sus habitantes. “Así, no tendremos estas noticias de que se cayó una pared y de pronto alguien que caminaba perdió la vida. Algo tan simple, la normativa actual no lo permitía”, puntualizó.
Derecho de preferencia
Para Lourdes Giusti, es destacable que la nueva ley permita que si un inmueble es declarado inhabitable y pasan 15 años sin que el propietario haya hecho algo para mejorarla, se expropie y pase a manos de la Municipalidad de Lima.
Otro punto que resaltó la decana es el derecho de preferencia en toda transferencia de inmuebles del Centro Histórico capitalino que se otorgará a la comuna metropolitana.
“Por ejemplo, si alguien quiere vender su propiedad, en primer lugar, le deberá avisar a la Municipalidad de Lima que tendrá la primera opción. Lo bueno es que le otorgará al municipio capitalino un plazo de 15 días hábiles para su respuesta”, refirió.
Entonces, si la municipalidad quiere, le interesa y cuenta con los fondos lo podrá adquirir y si no responde en ese lapso, no tiene los recursos, ni el interés, el propietario no estará impedido de vendérselo a un tercero, explicó.
“Otra cosa positiva es que con esta ley se podrá ejecutar proyectos de viviendas de interés social. Algo que se criticaba mucho del plan histórico era que no tenía un aspecto humano, porque tampoco se trata de botar del lugar a las personas que viven ahí ahora que sube de valor”, aseveró.
La decana proyectó que del dinero que recibirá la Municipalidad de Lima por el IGV, que serán cerca de 200 millones de soles, hasta el 20% se podrá destinar para viviendas de interés social. “Es decir, 40 millones de soles para que el municipio pueda ejecutar programas en que se reubiquen a las personas que viven en el Centro Histórico de Lima”, aseveró.
Fuente: El Peruano
Fecha: 29/01/2024
